A lo largo de todo un año y a través de encuentros celebrados en Bethlehem, nos hemos ido acompañando por el camino de la vida para compartirla y ahondarla, ofreciendo luz a temas trascendentales que fundamentan nuestra vida humana: muerte, vida, comunicación, creatividad, nueva humanidad, claves para vivir una vida cada vez más del Ser…
Es tiempo de contemplar la cosecha para disponernos al descanso estival con la plenitud que da una tarea a la que nos hemos dedicado amorosamente y que se nos muestra fecunda.
Los frutos se cosechan en cada corazón alcanzado por estas palabras, acogidas como semilla buena y cultivadas en la tierra de la cotidianidad de cada persona.
Ahora toca celebrar todo lo que se ha cosechado y el proceso, donde el amor y la verdad y la belleza se han hecho presentes de múltiples formas.
He disfrutado mucho de todo lo acontecido en estas entrevistas, por los que hoy las corono con la gratitud de mi corazón
Y tras el descanso, comenzará una nueva siembra….